Durante la sesión europea temprana del lunes, el par de divisas GBP/USD experimentó una ligera caída, cotizando aproximadamente a 1.2945, lo que representa una disminución del 0.11% en el día. Este movimiento a la baja continúa reflejando un sentimiento bajista, ya que el par se mantiene posicionado por debajo de la Media Móvil Exponencial (EMA) de 100 días y el Índice de Fuerza Relativa (RSI) indica una presión de venta adicional.
La reciente caída en GBP/USD se puede atribuir a un dólar estadounidense más fuerte, influenciado por las expectativas del mercado de un enfoque más cauteloso hacia el alivio monetario por parte de la Reserva Federal. Sin datos económicos significativos esperados tanto del Reino Unido como de los EE. UU. en el corto plazo, se espera que las fluctuaciones en el USD sigan siendo una fuerza impulsora que afecte el rendimiento del par.
El análisis técnico actual sugiere que la tendencia bajista se mantiene firme mientras el par se sitúa por debajo de la EMA de 100 períodos en el gráfico diario. El RSI, posicionado por debajo de la marca de 50 en aproximadamente 37.70, indica además una continuación del impulso a la baja, reforzando el sentimiento de venta predominante.
En términos de niveles de soporte, el límite inferior de la Banda de Bollinger se ubica en 1.2870, marcando el primer nivel clave a monitorear. Un movimiento decisivo por debajo de este punto podría desencadenar más caídas, alcanzando potencialmente 1.2763, que fue visto por última vez el 13 de agosto. Por debajo de esto, el siguiente soporte significativo a observar se encuentra en 1.2665, el mínimo registrado a principios de agosto.
Por el contrario, si GBP/USD encuentra un impulso ascendente, el nivel psicológico de 1.3000 sirve como la resistencia inmediata. Una ruptura en este punto podría allanar el camino hacia una trayectoria positiva hacia 1.3071, que representa el máximo del 18 de octubre, y luego acercándose a 1.3185, el máximo visto el 5 de septiembre.
