Australia ha experimentado un notable aumento en el número de cajeros automáticos de criptomonedas, que han aumentado 17 veces en los últimos dos años. Actualmente, el país cuenta con 1,162 de estas máquinas, lo que lo convierte en el tercer mercado más grande a nivel mundial para cajeros automáticos de criptomonedas, según cifras recientes. Este crecimiento es significativo, considerando que el número de máquinas activas era de solo 67 en agosto de 2022. Desde alcanzar el hito de más de 1,000 unidades en operación en abril, Australia ha añadido 160 cajeros automáticos adicionales.
Sin embargo, esta rápida expansión no ha pasado desapercibida para los organismos reguladores y las fuerzas del orden. La Policía Federal Australiana, reconociendo el potencial de abuso, lanzó un grupo de trabajo interinstitucional destinado a abordar las actividades de lavado de dinero relacionadas con los cajeros automáticos de criptomonedas. Estos quioscos han sido señalados como un riesgo para el lavado de dinero, en gran parte porque permiten transacciones en efectivo y, por lo general, no requieren que los usuarios tengan una cuenta.
A nivel mundial, las preocupaciones están aumentando respecto a la implicación de los cajeros automáticos de criptomonedas en actividades criminales, incluyendo estafas y lavado de dinero. Se ha informado que estas máquinas procesaron aproximadamente $160 millones en transacciones ilícitas desde 2019. La proporción de actividad ilícita en el sector de efectivo a criptomonedas es significativamente más alta que en el mercado más amplio de criptomonedas, lo que destaca las vulnerabilidades aumentadas asociadas con estas máquinas.
Las estafas y actividades fraudulentas se han vuelto predominantes en la esfera de las transacciones ilícitas de criptomonedas, con una porción sustancial atribuida a carteras relacionadas con estafas conocidas. En un esfuerzo por mitigar el abuso, algunos quioscos ahora presentan advertencias o listas de verificación para informar a los usuarios sobre posibles estafas.
Las respuestas regulatorias a los problemas en torno a los cajeros automáticos de criptomonedas están evolucionando. Por ejemplo, en las últimas semanas, las autoridades financieras alemanas incautaron 13 cajeros automáticos, mientras que la Autoridad de Conducta Financiera en el Reino Unido retiró 26 máquinas no autorizadas el año pasado, reduciendo significativamente el número de unidades activas en ese mercado.