La tasa de cambio USD/CAD enfrenta una presión de venta persistente, permaneciendo cerca de un mínimo de varios meses alrededor de 1.3580 durante la primera sesión europea. A pesar de las condiciones favorables recientes, como el aumento de los rendimientos de los bonos estadounidenses, que generalmente refuerzan la demanda del dólar estadounidense, esto no ha sido suficiente para entusiasmar a los participantes del mercado o revertir la tendencia bajista actual. Agravando estos desafíos está la caída en los precios del petróleo crudo, que a menudo es perjudicial para el dólar canadiense, el cual también ha fallado en proporcionar algún alivio.
El dólar canadiense ha ganado tracción en parte debido al estrechamiento de la brecha de tasas de interés entre Canadá y EE.UU., con los inversores anticipando cada vez más un ciclo de relajación más agresivo por parte de ambos bancos centrales. La probabilidad de un recorte de tasas de 50 puntos básicos por parte de la Reserva Federal durante su próxima reunión ha aumentado significativamente, impulsada por un informe reciente que indica un mercado laboral estadounidense más débil. El informe reveló que los empleadores estadounidenses añadieron casi 818,000 empleos menos de lo que se informó inicialmente, apoyando aún más las expectativas de tasas de interés más bajas.
Además, las actas de la reunión del Comité Federal de Mercados Abiertos de julio sugieren un fuerte consenso entre los responsables políticos para un posible recorte de tasas el próximo mes, con algunos incluso favorando una acción inmediata. Esta perspectiva sirve para compensar el impacto negativo de la caída de los precios del petróleo crudo, que se ha visto exacerbada por preocupaciones sobre la demanda global. A pesar de las tensiones en el Medio Oriente, los precios del petróleo siguen deprimidos, afectando al dólar canadiense sensible a las materias primas.
El análisis técnico indica que el par USD/CAD ha cerrado recientemente por debajo de la media móvil simple de 200 días, por primera vez desde marzo. El Índice de Fuerza Relativa ahora está rondando en territorio de sobreventa, sugiriendo una posible necesidad de consolidación a corto plazo o un ligero rebote. Cualquier movimiento ascendente podría encontrar una resistencia significativa alrededor del nivel 1.3600. Por el contrario, los niveles de soporte se identifican en 1.3535 y el límite psicológico de 1.3500. Un movimiento por debajo de estos niveles podría desencadenar caídas adicionales hacia la región de 1.3420.