El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha presentado cargos contra Maximiliano Pilipis, el operador del intercambio de criptomonedas AurumXchange, por acusaciones de lavado de dinero conectadas al notorio mercado negro Silk Road. Según una declaración reciente, el DOJ afirma que de 2009 a 2013, AurumXchange procesó más de 30 millones de dólares a través de aproximadamente 100,000 transacciones. Muchos de estos fondos supuestamente provenían de cuentas asociadas con Silk Road.
Silk Road, que funcionó de 2011 a 2013 bajo el alias Dread Pirate Roberts, era un mercado anónimo utilizado principalmente para transacciones ilícitas relacionadas con drogas. El FBI desmanteló la plataforma en 2013, el mismo año en que Pilipis supuestamente operó AurumXchange sin la licencia necesaria. La acusación sugiere que se benefició enormemente al facilitar transacciones, acumulando millones en tarifas, incluyendo alrededor de 10,000 Bitcoin valorados en aproximadamente 1.2 millones de dólares durante ese período.
Además, el DOJ detalla que Pilipis no cumplió con los requisitos federales de registro e informes, descuidando registrarse en el Departamento del Tesoro de EE. UU. y no adhiriéndose a los protocolos de informes financieros obligatorios. Sus operaciones supuestamente ignoraron las regulaciones de Conozca a Su Cliente (KYC), que son fundamentales para el cumplimiento de las leyes de Lavado de Dinero (AML) y financiamiento del terrorismo (CTF).
Tras el cierre de AurumXchange, se afirma que Pilipis participó en actividades para lavar y disfrazar los ingresos ilícitos. Supuestamente, convirtió su criptomoneda en dólares estadounidenses, invirtiendo posteriormente en bienes raíces en Indiana. Se dice que esta empresa generó ingresos sustanciales, sin embargo, no presentó declaraciones de impuestos en 2019 y 2020.
Un gran jurado federal ha emitido una acusación sustitutiva, imputando a Pilipis cinco cargos de lavado de dinero y dos cargos de no presentar intencionadamente una declaración de impuestos. Si se le encuentra culpable, las sanciones podrían incluir una pena máxima de prisión de diez años y una multa de 250,000 dólares. No obstante, la determinación final sobre la sentencia corresponderá a un juez del tribunal de distrito federal, quien considerará varios factores legales.