Un ciudadano canadiense enfrenta serios cargos en los Estados Unidos por presuntamente explotar plataformas de finanzas descentralizadas (DeFi), lo que resultó en el robo de aproximadamente 65 millones de dólares y actividades de lavado de dinero posteriores. La acusación, desclasificada en un tribunal federal de Brooklyn, acusa a Andean Medjedovic de varios delitos, incluidos el hackeo, la extorsión tentativa, el lavado de dinero y el fraude electrónico. Actualmente, se cree que está prófugo.
Según las acusaciones, Medjedovic manipuló los sistemas de Indexed Finance y KyberSwap para desviar grandes sumas de dinero. Específicamente, en octubre de 2021, ejecutó operaciones engañosas que le permitieron robar alrededor de 16.5 millones de dólares de los fondos de liquidez de Indexed Finance. Sus actividades se intensificaron en noviembre de 2023 cuando supuestamente atacó a KyberSwap, extrayendo un estimado de 48.8 millones de dólares.
Los fiscales detallan que Medjedovic participó en un esquema de comercio fraudulento, tomando prestadas vastas cantidades de tokens digitales y explotando vulnerabilidades dentro de los contratos inteligentes de las plataformas. Esta manipulación, según se informa, resultó en el cálculo erróneo de métricas financieras clave, lo que le permitió retirar fondos de inversores a valores artificialmente inflados, dejando así las inversiones de muchas víctimas casi sin valor.
Además, después de su supuesta explotación de KyberSwap, Medjedovic supuestamente intentó extorsionar a las víctimas proponiendo un falso acuerdo. Se comunicó a través de mensajes en cadena, amenazando con prolongar las discusiones sobre el regreso de los fondos a menos que se le otorgara el control del protocolo a cambio de devolver la mitad de los activos que había adquirido ilegalmente.
Adicionalmente, la acusación afirma que Medjedovic conspiró con un familiar para lavar la criptomoneda robada a través de un mezclador y varios puentes de blockchain, con la intención de convertir los fondos en efectivo a través de intercambios y cuentas bancarias creadas con detalles ficticios. Cuando un protocolo de puente congeló algunos de los activos, supuestamente ofreció 85,000 dólares a un oficial encubierto de la ley que estaba haciéndose pasar por desarrollador de software, para descongelar los fondos.