Los precios del Oro están experimentando un impulso alcista, impulsado en gran medida por el debilitamiento del dólar estadounidense debido al sentimiento dovish de la Reserva Federal. Las preocupaciones sobre una posible desaceleración económica en los Estados Unidos también están contribuyendo al atractivo del Oro como activo refugio. Los operadores están mostrando una mayor cautela mientras anticipan la publicación de datos clave de empleo.
El jueves, los precios del Oro se acercaron a la zona de suministro de $2,524 – $2,525, ayudados por un dólar en debilidad influenciado por las expectativas de una importante reducción de tasas de interés por parte de la Reserva Federal más adelante este mes. Los datos recientes de empleo de Estados Unidos pintaron un panorama mixto, indicando un mercado laboral en desaceleración, lo que amplificó los temores sobre la salud general de la economía. Esta atmósfera de incertidumbre ha elevado las expectativas de un alivio más agresivo de la política monetaria, causando que el dólar retroceda desde un máximo de dos semanas alcanzado a principios de la semana.
El sentimiento de los inversores se ha visto aún más afectado por las crecientes preocupaciones de una recesión económica y las tensiones geopolíticas en curso, que han aumentado colectivamente la demanda de Oro . Si bien el precio del Oro se mantiene por debajo de su máximo histórico de agosto, los operadores están listos para reaccionar al próximo informe mensual de empleo, que se espera que ofrezca información sobre las futuras decisiones de tasas de la Fed. Esta información probablemente influya en las estrategias de trading a corto plazo para el metal precioso.
Desde un punto de vista técnico, el movimiento del Oro más allá del nivel de $2,524 – $2,525 podría servir como una señal positiva para los operadores alcistas. Los indicadores sugieren que el Oro está posicionado para ganancias adicionales, ya que el impulso actual se mantiene robusto pero no sobrecomprado. Por el contrario, el nivel de $2,500 se considera un punto de soporte clave. Si los precios caen por debajo de este umbral, podrían bajar al rango de $2,471 – $2,470, arriesgándose a caídas más profundas hacia la media móvil simple de 50 días cerca de $2,440, y potencialmente hacia el nivel de $2,400.