Los residentes de Granbury, Texas, se han unido para presentar una demanda contra la empresa de minería de criptomonedas Marathon Digital, citando el ruido excesivo de su instalación de minería de Bitcoin cercana. La queja, presentada el 4 de octubre en el Tribunal del Condado de Hood, describe el ruido como una perturbación considerable que causa un gran malestar a quienes viven en la proximidad del lugar.
Los habitantes locales informan que experimentan una serie de efectos negativos en la salud, incluyendo fatiga, migrañas y problemas de memoria, derivadas del ruido y las vibraciones continuas asociadas con las operaciones de minería. Muchos afirman que sus condiciones médicas existentes, como la hipertensión, han empeorado debido a la incesante perturbación. La demanda detalla cómo los residentes pueden escuchar el ruido y sentir las vibraciones incluso cuando están dentro de sus hogares, afirmando que la situación ha obstaculizado gravemente su disfrute de sus propiedades.
Además de los impactos en la salud, la demanda también plantea preocupaciones sobre las implicaciones financieras de las actividades mineras. Los residentes alegan que el considerable consumo de energía requerido para las operaciones ha llevado a un aumento en las facturas de electricidad y a una disminución en los valores de las propiedades en la zona. Los residentes afectados, representados por un abogado senior de la organización sin fines de lucro Earthjustice, exigen que Marathon tome medidas inmediatas para aliviar la contaminación acústica o cesar las operaciones por completo.
Los demandantes buscan una orden judicial permanente para evitar que la instalación minera genere ruido inapropiado, así como compensación por daños y costos legales. La mina de Bitcoin de Granbury, construida inicialmente en abril de 2022, ha tenido varios cambios de propiedad, con Marathon asumiendo el control en enero. Se informa que la instalación alberga un considerable número de rigs de minería, contribuyendo a su supuesta tasa de hashrate de 4.3 ExaHashs por segundo.
Esta demanda refleja acciones recientes tomadas por residentes en otras regiones, como Noruega, donde una operación minera fue cerrada debido a quejas por ruido. Sin embargo, las consecuencias de tales cierres pueden llevar a un aumento en los costos de electricidad para los residentes locales, destacando el complejo equilibrio entre las operaciones de minería de criptomonedas y el bienestar comunitario.