Los precios de la Plata han continuado disminuyendo por segundo día consecutivo, mostrando signos de vulnerabilidad para posibles caídas adicionales. Después de alcanzar alrededor de $33.00 la semana pasada, un pico no visto desde diciembre de 2012, el metal ha estado bajo una creciente presión de venta, arrastrándolo actualmente a aproximadamente $31.00, marcando un mínimo en una semana.
El análisis técnico revela un patrón bajista de múltiples picos que se desarrolla en el gráfico diario debido a fracasos repetidos para mantener el comercio por encima del nivel de $32.00. Aunque los osciladores sugieren un posible impulso a la baja, aún no han confirmado una fuerte tendencia negativa. Se aconseja a los comerciantes que observen de cerca un movimiento decisivo por debajo del umbral de $31.00, lo que podría señalar una caída adicional.
Si se produce esta ruptura, la Plata podría caer hacia el rango crítico de soporte de $30.60 a $30.55, lo que podría llevar a una prueba del nivel psicológico de $30.00. Más allá de eso, el siguiente enfoque serían la confluencia de niveles de soporte entre $29.75 y $29.55, impulsados tanto por la media móvil simple de 100 días como por la de 50 días. Una ruptura a través de estos niveles podría abrir el camino para una caída hacia $29.00 y posteriormente hacia el rango de soporte de $28.60 a $28.50.
Por el contrario, si la Plata logra romper por encima de $31.55, podría experimentar un movimiento ascendente hacia una resistencia intermedia en $31.75 a $31.80, seguido por el nivel de $32.00. Un empuje sustancial más allá de la zona de oferta de $32.25 podría permitir a los compradores tener la oportunidad de apuntar nuevamente al nivel de $33.00, desafiando potencialmente el pico de aproximadamente $33.85 alcanzado en diciembre de 2012.